Los síntomas psicológicos de la ansiedad son los que pertenecen al ámbito cognitivo y conductual. Estos síntomas tienen una función importante en la ansiedad, ya que son los que nos permiten interpretar, evaluar y afrontar las situaciones que nos generan ansiedad. Sin embargo, también pueden ser los que nos causan más malestar, limitación y sufrimiento.
¿Por qué nos preocupan tanto los síntomas psicológicos?
Los síntomas psicológicos nos preocupan porque nos
hacen sentir vulnerables, incapaces, inferiores o anormales. Nos hacen pensar
que algo malo nos va a pasar, que no vamos a poder controlar la situación, que
vamos a fracasar o que vamos a ser rechazados. Nos hacen sentir culpables,
avergonzados o frustrados por no ser capaces de manejar nuestra ansiedad. Nos
hacen dudar de nuestra salud mental, de nuestra competencia, de nuestra valía o
de nuestro futuro.
Además, estos síntomas nos preocupan porque nos
retroalimentan y nos mantienen en un círculo vicioso. Es decir, cuanto más nos
preocupamos por ellos, más ansiosos nos ponemos, y cuanto más ansiosos nos
ponemos, más síntomas tenemos. Así, entramos en una espiral de ansiedad que nos
dificulta salir de ella.
¿En qué nos ayudan los síntomas psicológicos?
A pesar de que los síntomas psicológicos de la
ansiedad nos pueden causar mucho malestar, también tienen una función positiva
y adaptativa.
Nos ayudan a:
- Detectar
y reconocer las situaciones que nos generan ansiedad, lo que nos permite
estar alertas y preparados para afrontarlas.
- Movilizar
nuestros recursos personales, como la atención, la memoria, la
creatividad, la motivación, la resolución de problemas, etc., para buscar
soluciones a las situaciones que nos generan ansiedad.
- Aprender
de nuestras experiencias, lo que nos permite mejorar nuestras habilidades,
aumentar nuestra confianza y reducir nuestra ansiedad ante situaciones
similares en el futuro.
- Expresar
y comunicar nuestras emociones, lo que nos permite liberar tensión, buscar
apoyo y comprensión, y establecer vínculos afectivos con otras personas.
¿Cómo nos impiden realizar acciones de la vida cotidiana y cómo limitan nuestros entornos laboral, familiar, social y personal?
Los síntomas psicológicos de la ansiedad nos
impiden realizar acciones de la vida cotidiana y limitan nuestros entornos
cuando son demasiado intensos, frecuentes, persistentes o desadaptativos. En
estos casos, los síntomas psicológicos de la ansiedad nos impiden y limitan de
las siguientes formas:
- Nos
distraen y nos impiden concentrarnos en las tareas que tenemos que hacer,
lo que afecta a nuestro rendimiento, productividad y calidad de nuestro
trabajo o estudio.
- Nos
bloquean y nos impiden tomar decisiones, lo que afecta a nuestra
autonomía, responsabilidad y capacidad de elección.
- Nos
inhiben y nos impiden expresarnos, lo que afecta a nuestra comunicación,
creatividad y participación.
- Nos
aíslan y nos impiden relacionarnos, lo que afecta a nuestra sociabilidad,
integración y pertenencia.
- Nos
limitan y nos impiden disfrutar, lo que afecta a nuestra satisfacción,
felicidad y calidad de vida.
¿Qué podemos hacer para mejorar los síntomas psicológicos?
Los síntomas psicológicos de la ansiedad se pueden
mejorar con una intervención psicológica adecuada, que puede incluir diferentes
técnicas y estrategias, como:
- La
reestructuración cognitiva, que consiste en identificar, cuestionar y
modificar los pensamientos negativos o irracionales que generan ansiedad,
por otros más positivos, racionales y adaptativos.
- La
exposición, que consiste en enfrentarse gradualmente y de forma controlada
a las situaciones que generan ansiedad, para habituarse a ellas y reducir
el miedo y la evitación.
- La
relajación, que consiste en aprender y practicar diferentes métodos para
reducir la tensión física y mental que produce la ansiedad, como la
respiración diafragmática, la relajación muscular progresiva, el
mindfulness, etc.
- El
entrenamiento en habilidades sociales, que consiste en adquirir y mejorar
las capacidades para relacionarse con los demás de forma efectiva,
asertiva y satisfactoria, como la escucha activa, la expresión de
opiniones, la resolución de conflictos, etc.
- El
apoyo social, que consiste en buscar y mantener el contacto con personas
que nos brinden afecto, comprensión, ayuda y consejo, como la familia, los
amigos, los profesionales, los grupos de autoayuda, etc.
Estas son algunas de las formas en las que podemos
entender, afrontar y superar los síntomas psicológicos de la ansiedad.
Recuerda que la ansiedad es una emoción normal y
que puedes controlarla con la ayuda adecuada. No estás solo, ni eres el único
que sufre de ansiedad. Hay muchas personas que han pasado por lo mismo que tú y
que han logrado vencerla.
Tú también puedes hacerlo.
FUENTES:
- American Psychiatric Association.
(2013). Diagnostic and statistical manual of mental disorders (5th ed.). Washington,
DC: Author.
- Beck, A. T., & Clark, D. A. (2011).
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York, NY: Guilford Press.
- Craske, M. G., & Barlow, D. H.
(2008). Panic disorder and agoraphobia. In D. H. Barlow (Ed.), Clinical
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ed., pp. 1-64). New York, NY: Guilford Press.
- Martín,
J. L., & Caballo, V. E. (2015). Manual de técnicas de terapia y
modificación de conducta. Madrid, España: Siglo XXI.
- Olatunji, B. O., Cisler, J. M., &
Deacon, B. J. (2010). Efficacy of cognitive behavioral therapy for anxiety
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