¿Sabías que las enfermedades crónicas pueden afectar a tu salud mental?
Las enfermedades crónicas son
aquellas que duran mucho tiempo o que no tienen cura, como el cáncer, la
diabetes, las enfermedades cardíacas o el dolor. Estas enfermedades pueden
tener un gran impacto en la vida de las personas que las padecen y de sus
familiares, afectando no solo a su salud física, sino también a su salud
mental.
Foto de National Cancer Institute en Unsplash
La salud mental se refiere al
bienestar emocional, psicológico y social de una persona. Es importante para
poder afrontar los desafíos de la vida, relacionarse con los demás y disfrutar
de las cosas que nos gustan. Sin embargo, cuando se tiene una enfermedad
crónica, la salud mental puede verse afectada por diferentes factores, como:
- La incertidumbre sobre el futuro o el resultado del tratamiento.
- El estrés o la ansiedad por los cambios en la rutina, las limitaciones o el dolor.
- La tristeza o la depresión por la pérdida de la salud, el interés o el placer en las actividades.
- El miedo a lo desconocido, al sufrimiento o a la muerte.
- Los sentimientos de culpa, impotencia o baja autoestima por no poder hacer lo que se hacía antes o por depender de otros.
- Los problemas de adaptación a una nueva realidad o a un nuevo rol.
Estos sentimientos son
normales y comprensibles ante una situación difícil como es tener una
enfermedad crónica. Sin embargo, si son muy intensos o duran mucho tiempo,
pueden interferir con el funcionamiento diario y la calidad de vida de las
personas. Por eso, es importante reconocer y tratar los problemas de salud
mental que puedan surgir en los pacientes con enfermedades crónicas y en sus
familiares.
ÍNDICE
- ¿Qué es la depresión y cómo se trata?
- ¿Qué es la ansiedad y cómo se trata?
- ¿Qué otras dificultades psicológicas pueden aparecer en las personas con enfermedades crónicas?
- ¿Cómo cuidar la salud mental de los familiares de los pacientes con enfermedades crónicas?
- ¿Dónde encontrar ayuda profesional?
INTRODUCCIÓN
Las enfermedades crónicas son
un reto para la salud física y mental de las personas que las sufren y de sus
seres queridos. En esta publicación vamos a hablar sobre algunos de los
problemas psicológicos más comunes que pueden afectar a los pacientes con
enfermedades crónicas y a sus familiares, como la depresión y la ansiedad.
También vamos a dar algunos consejos para cuidar la salud mental y mejorar el
bienestar emocional de estas personas. Por último, vamos a ofrecer algunas
fuentes de información y ayuda profesional para quienes lo necesiten.
¿Qué es la depresión y cómo se trata?
La depresión es un trastorno
del estado de ánimo que se caracteriza por una tristeza profunda y persistente,
acompañada de otros síntomas como:
- Pérdida de interés o placer en las cosas que antes se disfrutaban.
- Cambios en el apetito o el peso.
- Problemas para dormir o dormir demasiado.
- Falta de energía, cansancio o lentitud.
- Dificultad para concentrarse, recordar o tomar decisiones.
- Sentimientos de culpa, inutilidad o desesperanza.
- Pensamientos negativos sobre uno mismo, el mundo o el futuro.
- Pensamientos sobre la muerte o el suicidio.
La depresión es una enfermedad
seria que puede afectar a cualquier persona, pero especialmente a quienes
tienen una enfermedad crónica. Según el Instituto Nacional de Salud Mental
(NIMH), las personas con otras enfermedades médicas crónicas tienen un mayor
riesgo ... riesgo de depresión. La depresión es una enfermedad grave que se
caracteriza por una tristeza profunda y persistente, que afecta a la capacidad
de disfrutar de la vida y de realizar las actividades cotidianas. La depresión
se puede tratar con medicamentos y con terapia psicológica, o con una
combinación de ambos.
Los medicamentos
antidepresivos son fármacos que actúan sobre el cerebro para regular el estado
de ánimo y aliviar los síntomas de la depresión. Existen diferentes tipos de
antidepresivos, como los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina
(ISRS), los antidepresivos tricíclicos o los inhibidores de la monoaminooxidasa
(IMAO). El médico debe elegir el antidepresivo más adecuado para cada persona,
teniendo en cuenta su diagnóstico, su historial médico, sus posibles
interacciones con otros medicamentos y sus efectos secundarios².
La terapia psicológica es un
proceso de intervención que utiliza técnicas basadas en la evidencia científica
para modificar las conductas, los pensamientos y las emociones que causan o
mantienen la depresión. La terapia psicológica más empleada y efectiva para
tratar la depresión es la terapia cognitivo-conductual (TCC), que se basa en
identificar y cambiar los patrones de pensamiento negativo y las conductas
inadaptadas que generan o agravan el malestar emocional³. Otra terapia
psicológica que ha demostrado su utilidad es la terapia interpersonal (TIP),
que se centra en mejorar las relaciones sociales y resolver los conflictos
interpersonales que pueden influir en la depresión³.
El tratamiento de la depresión
suele durar varios meses, y es importante seguir las indicaciones del médico y
del psicólogo, así como acudir a las consultas y revisiones periódicas. El
tratamiento puede variar según la evolución de cada persona, y se debe ajustar
o cambiar si no se observa una mejoría o si aparecen efectos adversos. El
tratamiento también debe continuar hasta que se logre una remisión completa de
los síntomas, para evitar las recaídas o las recurrencias.
Foto de Alexander Grey en Unsplash
¿Qué es la ansiedad y cómo se trata?
La ansiedad es una reacción
normal del organismo ante situaciones que percibimos como amenazantes o
peligrosas. La ansiedad nos ayuda a prepararnos para afrontar el desafío o el
riesgo, activando nuestro sistema nervioso y aumentando nuestra atención,
nuestra energía y nuestra capacidad de respuesta. Sin embargo, cuando la
ansiedad es excesiva, desproporcionada o persistente, puede interferir con
nuestro funcionamiento normal y causarnos malestar físico y psicológico.
La ansiedad se puede
manifestar con síntomas como:
- Nerviosismo, inquietud o irritabilidad.
- Sensación de miedo, pánico o peligro inminente.
- Dificultad para respirar, taquicardia, sudoración o temblores.
- Opresión en el pecho, náuseas o mareos.
- Problemas para concentrarse, recordar o tomar decisiones.
- Insomnio o pesadillas.
- Evitación de situaciones que provocan ansiedad o dificultad para afrontarlas.
La ansiedad se puede tratar
con medicamentos y con terapia psicológica, o con una combinación de ambos.
Los medicamentos ansiolíticos
son fármacos que actúan sobre el cerebro para reducir la ansiedad y relajar el
cuerpo. Existen diferentes tipos de ansiolíticos, como las benzodiazepinas, los
antihistamínicos o los betabloqueantes. El médico debe elegir el ansiolítico
más adecuado para cada persona, teniendo en cuenta su diagnóstico, su historial
médico, sus posibles interacciones con otros medicamentos y sus efectos
secundarios².
La terapia psicológica es un
proceso ... proceso de intervención que utiliza técnicas basadas en la
evidencia científica para modificar las conductas, los pensamientos y las
emociones que causan o mantienen la ansiedad. La terapia psicológica más
empleada y efectiva para tratar la ansiedad es la terapia cognitivo-conductual
(TCC), que se basa en identificar y cambiar los patrones de pensamiento
negativo y las conductas inadaptadas que generan o agravan el malestar
emocional⁴. Otra terapia psicológica que ha demostrado su utilidad es la
terapia de aceptación y compromiso (TAC), que se centra en aceptar los
pensamientos y emociones desagradables sin luchar contra ellos, y en actuar de
acuerdo con los valores personales⁵.
El tratamiento de la ansiedad
suele durar entre 8 y 20 sesiones, dependiendo de la gravedad y el tipo de
ansiedad. Es importante seguir las indicaciones del psicólogo y practicar las
técnicas aprendidas en la terapia en el día a día. El tratamiento puede variar
según la evolución de cada persona, y se debe ajustar o cambiar si no se
observa una mejoría o si aparecen efectos adversos. El tratamiento también debe
continuar hasta que se logre una reducción significativa de los síntomas, para
evitar las recaídas o las recurrencias.
¿Qué otras dificultades psicológicas pueden aparecer en las personas con enfermedades crónicas?
Además de la depresión y la
ansiedad, las personas con enfermedades crónicas pueden presentar otras
dificultades psicológicas, como:
Baja autoestima: se
refiere a la valoración negativa que una persona tiene de sí misma, de sus
capacidades, su aspecto o su valía. La baja autoestima puede afectar a la
confianza, la seguridad y el respeto propio, así como a las relaciones con los
demás.
Estrés: se
refiere a la respuesta del organismo ante situaciones que exigen un esfuerzo o
un cambio. El estrés puede ser positivo si nos ayuda a adaptarnos o a
superarnos, pero puede ser negativo si nos sobrepasa o nos desborda. El estrés
puede causar problemas físicos y psicológicos, como dolores, insomnio,
irritabilidad o dificultad para concentrarse.
Duelo: se
refiere al proceso de adaptación emocional que sigue a una pérdida
significativa. En el caso de las enfermedades crónicas, la pérdida puede ser de
la salud, de la autonomía, de los proyectos o de los roles anteriores. El duelo
implica atravesar diferentes fases o etapas, como la negación, la ira, la
negociación, la depresión y la aceptación.
Aislamiento social: se
refiere a la disminución o el cese de las interacciones sociales con otras personas.
El aislamiento social puede deberse a factores personales (como el miedo, la
vergüenza o el desinterés) o a factores externos (como las barreras físicas,
económicas o culturales). El aislamiento social puede tener consecuencias
negativas para la salud física y mental, como el deterioro cognitivo, el
aumento del riesgo cardiovascular o el empeoramiento del estado de ánimo.
Foto de Volodymyr Hryshchenko en Unsplash
¿Cómo cuidar la salud mental de los familiares de los pacientes con enfermedades crónicas?
Los familiares de los
pacientes con enfermedades crónicas también pueden sufrir problemas de salud
mental derivados del estrés, la preocupación, el cansancio o el cambio de roles
que implica cuidar de una persona enferma. Por eso, es importante que los
familiares también cuiden su salud mental y se apoyen en los siguientes
recursos:
Información: es
fundamental que los familiares conozcan bien la enfermedad, sus causas, sus
síntomas, su tratamiento y su pronóstico. La información ayuda a reducir la
incertidumbre, a prevenir complicaciones y a tomar decisiones adecuadas.
Apoyo emocional: es
esencial que los familiares expresen sus emociones ... emociones y busquen
apoyo en otras personas que les puedan comprender, escuchar y ayudar. El apoyo
emocional puede provenir de la familia, los amigos, los profesionales o los
grupos de autoayuda.
Cuidado personal: es
importante que los familiares se cuiden a sí mismos, tanto física como
psicológicamente. El cuidado personal implica mantener una alimentación
equilibrada, hacer ejercicio regularmente, descansar lo suficiente, dedicar
tiempo a las aficiones y al ocio, y buscar ayuda profesional si se siente
sobrepasado o deprimido.
Respiro familiar: se
refiere a la posibilidad de delegar temporalmente el cuidado del paciente en
otras personas o servicios, para poder desconectar y recuperar energía. El
respiro familiar puede ser formal (como centros de día, residencias o
cuidadores profesionales) o informal (como otros familiares, amigos o
voluntarios).
Educación sanitaria: se
trata de aprender habilidades y estrategias para cuidar mejor al paciente y a
uno mismo. La educación sanitaria puede incluir aspectos como la administración
de medicamentos, la prevención de infecciones, la movilización del paciente, la
gestión del estrés o la resolución de conflictos.
¿Dónde encontrar ayuda profesional?
Si crees que tú o algún
familiar sufre un problema de salud mental relacionado con una enfermedad
crónica, no dudes en buscar ayuda profesional. Existen diferentes recursos y
servicios que pueden ofrecerte información, orientación y tratamiento adecuados
a tu situación. Algunos de estos recursos son:
El médico de cabecera: es el
profesional sanitario más accesible y cercano, que puede valorar tu estado de
salud, derivarte a otros especialistas o prescribirte medicación si es
necesario.
El psicólogo: es el
profesional sanitario especializado en el diagnóstico y tratamiento de los
problemas de salud mental. Puede ofrecerte terapia psicológica individual,
grupal o familiar, según tus necesidades y preferencias.
El psiquiatra: es el
médico especializado en el diagnóstico y tratamiento de las enfermedades
mentales. Puede ofrecerte tratamiento farmacológico y terapia psicológica,
según el caso.
Los centros de salud mental: son
unidades especializadas que ofrecen atención integral a las personas con
problemas de salud mental y a sus familias. Cuentan con un equipo
multidisciplinar formado por psicólogos, psiquiatras, enfermeros, trabajadores
sociales y otros profesionales.
Las asociaciones de pacientes: son organizaciones
sin ánimo de lucro que agrupan a personas afectadas por una misma enfermedad o
problema de salud. Ofrecen información, apoyo emocional, asesoramiento legal y
actividades de sensibilización y defensa de los derechos de los pacientes.
FUENTES DE CONSULTA
- : Impacto de la enfermedad en el área psicológico o emocional. Enfermedad crónica: efectos sociales y emocionales - La Mente es Maravillosa. Recuperado el 10/05/2023 de https://lamenteesmaravillosa.com/enfermedad-cronica-efectos-sociales-y-emocionales/
- : NIMH » Las enfermedades crónicas y la salud mental: Cómo reconocer y tratar la depresión. Recuperado el 10/05/2023 de https://www.nimh.nih.gov/health/publications/espanol/las-enfermedades-cronicas-y-la-salud-mental-como-reconocer-y-tratar-la-depresion
- : Tratamiento de la depresión: medicamentos y terapias recomendadas - Webconsultas. Recuperado el 10/05/2023 de https://www.webconsultas.com/depresion/tratamiento-de-la-depresion-293
- : 6 tratamientos eficaces contra la ansiedad - Psicología y Mente. Recuperado el 10/05/2023 de https://psicologiaymente.com/clinica/tratamientos-ansiedad
- : 5 técnicas de tratamiento psicológico para la ansiedad - Mindy. Recuperado el 10/05/2023 de https://www.mindy.cl/tr
Publicar un comentario